Vía todo el mundo: Versvs, Baquia, The Register…
Parece ser que con la excusa de limitar el acceso a los pubs a los violentos esos que te pueden romper un vaso lleno de deliciosa ale (cerveza inglesa) en la cabeza, el gobierno británico apoya esta iniciativa de limitar el acceso a los pubs… leyendo las huellas dactilares de todos los que desean entrar.
Dispondrán de una lista negra de indeseables violentos a los que no se va a dejar entrar.
Según las autoridades del pueblo donde se ha probado esto, Yeovil, ya se notan los efectos de esta medida… la violencia doméstica ha aumentado, y es que si no te puedes pegar con alguien aprovechando una discusión sobre fútbol o rugby, pues la parienta ya va bien de felpudo.
Esperemos que los británicos se den cuenta de que esto es una grandísima tontería y que sienta un precedente pavoroso, y que crea economías de escala para que los precios de los lectores biométricos bajen más, y más, y más…
Y hablando de una futura Gran Bretaña represiva y brutal… aprovecho para recomendaros que vayáis a ver hijos de los hombres, y si no la habéis visto ya, V de vendetta.