Es una idea que llevaba tiempo dándome vueltas a la cabeza: cómo gracias a las redes sociales cada vez más gente escribe, pero a la vez cada vez lo que se escribe es más aquí te pillo aquí te mato, mucho más desestructurado, llegando al punto (twitter, actualizaciones de facebook etc.) de soltar una frase aquí, otra allá, emitiendo un discurso (a simple vista) desquiciado y, honestamente, sin pies ni cabeza. Seamos EnriqueDanseros y llamémosle a esto algo “fancy” como “la atomización del mensaje” pero en realidad y la mayoría de las veces es una dispersión tal del contenido, que ni a mensaje llega.
Anteriormente pensé que gracias a los blogs la gente estaba aficionándose a escribir, hasta que me cayó el veinte (me di cuenta) de que los blogueros en su gran mayoría eran los que en su vida pre-electrónica emborronaban papeles aquí y allá (con diarios personales, libros a medio escribir, cartas al periódico…). Bueno, estos y los profesionales con empresas de blogs que se nutren de publicidad y que en ese afán de postear, postear y postear para que no se “caiga” la audiencia, se han convertido en expertos en el noble arte del copiar y pegar. En aquella época tenía el corazón dividido respecto al fenómeno. Por un lado, el hecho de que las ideas de ciudadanos más o menos anónimos fuesen accesibles para quien tuviese un interés suficiente en el tema como para hacer un par de buenas búsquedas en Google es revolucionario. Pero también pensaba que era una lástima que los autores de algunos blogs tan bien escritos se centraran tanto en sus posts que no tuviesen tiempo de escribir algo más serio y estructurado (hasta que llegó Versvs y escribió la sociedad de control y me desmontó esa teoría, ¿o me dio la excepción que confirma la regla?). Pero el aspecto revolucionario de ofrecer nuevas maneras de informar de algo a quien quiera leerlo es tan importante,así como las comunidades de interés que se pueden formar gracias al noble arte de enlazar a otros contenidos o blogs, que los beneficios eclipsan al resto de dudas alrededor del asunto.
Si seguimos con el tema de los blogs, ya hemos comentado aquí que en los últimos tiempos parece este fenómeno estar sufriendo el acoso y derribo tanto de las autoridades (la UE proponiendo, y a un pelo de exigir, el registro de los bloggers antes de que puedan publicar una palabra) como de los medios de comunicación tradicionales (el grupo PRISA y muchos más acusando a Internet de ser la “madre de los rumores” e incluso de producir un desplome en bolsa… eso si un caso se lo achacamos a la falta de profesionalidad de los brokers que no contrastan sus informaciones, ¿no?). Y justo ahora, en la revista Wired sale un artículo del gurú de turno diciendo que tener un blog ya no mola porque huele a 2004. Que ahora lo más in es estar en una red social y twittear aggg twittear… (siempre el piar de los pájaros electrónicos estos).
¿Casualidad? No lo creo. Intento menos obvio de neutralizar el poder de los ciudadanos de a pie de denunciar y corregir las desinformaciones a las que nos vemos abocados día sí, día también, por el poder establecido mediante la prensa tradicional (a la tele ya ni la menciono, eso es circo, no información). El censurar no funciona bien ante la opinión pública (véase caso Frikipedia, que ha hecho que hasta mi madre le tenga manía a la SGAE, véase reacción ante la propuesta de registro de bloggers por parte de la UE), así que han dado paso al plan B – que la gente deje de publicar información persistente, fácilmente ubicable y que pueda resultar de más o menos riesgo para ¿el poder? ¿el sistema establecido? Dales Facebook, Bebo, Twenti, MySpace y deja que envíen media frase aquí y allá acompañada de una foto. Dales Twitter y déjales que informen al mundo entero y sus amigos en particular de que están jugando un partidillo de fútbol o que.. sí, que están «petaos» de tanto correr tras la pelota y se van a dormir.
(Hay un universo de diferencia entre twitter y otras redes de microposts como la genial por distribuida creada por los Exploradores Electrónicos, la RMD. No estoy por supuesto en contra del uso de herramientas novedosas –crear un post para escribir una frase es un engorro, cierto, y si esa frase es información valiosa pues no compartirla es una oportunidad de comunicación perdida-, tampoco estoy en contra de que la gente se divierta y sienta la necesidad de decir a sus amigos que se va a dormir, todos necesitamos ratos de banalidad en nuestra vida. Estoy en contra de la demonización, denostación, y posterior neutralización del fenómeno blogger mediante herramientas azucaradas. Si es que no hemos cambiado tanto con el tiempo, y ya desde los romanos el pan y circo ha funcionado a la perfección…)
Me he leído varias veces la web de RMD y sigo sin entender que hace realmente :/
Creo que llevas mucha razón: sobre la banalidad del dospuntocerismo, sobre el quitar relevancia a la blogsfera como estrategia de «despoderamiento» social…
Y yo añadiría que lo que comentas con el antiejemplo de Versvs tiene algo muy importante de fondo: la supeditación de todo el debate a la agenda del anglomundo informativo. Se que quedará autobombístico (gran pecado) pero precisamente es ahí donde queremos incidir con la Colección Planta 29. Los dos libros que ya han salido están escritos a partir del blog de sus autores (uno soy yo), los que vienen (el de Versvs, el de Juan Urrutia, «De las naciones a las redes», etc.) también.
Miguel Angel.
Son miniposts que publicas en algún blog (sea tuyo o de otra persona). Ese miniblog genera una RSS y otra persona puede «suscribir su blog» a esa RSS con lo cual aparecerán como miniposts también en allí.
Ejemplo: Vigi publica miniposts en http://exploradoreselectronicos.net/enlaces
Yo estoy suscrito a su hilo (de hecho a todos los hilos) en ese blog y los miniposts de Vigi aparecen publicados (con el avatar de Vigi) en mi blog (http://deugarte.com) en la sección RMD
Tienes toda la razón, los gobiernos y los partidos políticos en general se han dado cuenta de la fuente de información que suponen los blog. Eso de controlar los medios informativos ya no es la panacea para desinformar a los ciudadanos. La mejor manera que encuentran es aprobar la censura pura y dura sin jueces de por medio.
Saludos
¡¡qué bueno el artículo!!¡¡y qué razón tienes!!!
absolutamente deacuerdo.
Saludos.
Carmen Marín.
me ha encantado este artículo, estoy completamente de acuerdo con lo que aquí se dice. Creo que tu post tiene mucho que ver con lo que nosotros comentamos en este post, agracedecería tus comentarios http://blog.iberestudios.com/un-pueblo-que-no-sabe-leer-ni-escribir-es-un-pueblo-facilmente-manipulable/
Gracias, Oscar. Por cierto, me he leido el post que escribiste, y estoy de acuerdo con lo que allá expresas. Sigo con mis comentarios en tu blog, si te parece bien…
Caramba, por fin leo algo que me ilumina. Yo ando pensando crear algo que me permita promocionarme como psicólogo, y que pueda llegar a clientes potenciales, pero también quiero dar contenidos que sean de utilidad y aplicables para quien entre a ese sitio. Y ahora con la información que compartes con nosotros me queda claro que es un blog lo que debo crear.
Fíjate que al estar en Hi5, Facebook y oír por todos lados eso del Twitter pareciera más bien que si uno no tiene uno está fuera, pero estando dentro uno no sabe ni qué ocurre porque se dice mucho pero no se dice nada. Y con lo que has puesto en tu artículo me queda claro que el blog requiere también talento.
Muchas gracias