Vean esto.
Qué quieren que les diga. Podría decir que es una vergüenza que esta señora use el tiempo por el que le pagan los contribuyentes para revisar el ticket del súper.
Podría decir que es una vergüenza que a alguien le hagan fotos encima del hombro para ver qué está leyendo/escribiendo y que se publiquen en prensa nacional.
La fina línea entre ser personaje público, o representante de los ciudadanos que te votaron, y el derecho a la intimidad es muy fácil de cruzar. Especialmente cuando la prensa, coludidos con los políticos de signo opuesto, siempre andan locos por un titular.
Algo me dice que hacer de esto una noticia no es correcto. A la vez algo me dice que no es una excepción ni un desliz que los parlamentarios de todos los ámbitos se desentienden demasiado de los temas por los que les pagan para que les presten atención.
Resumen: DESCOMPOSICIÓN.