Cómo dejar de exponerse a las redes sociales sin convertirse en un ermitaño

Fame, serie televisiva de los 80 del siglo XX
De camino al trabajo iba escuchando el podcast de BBC Click y una activista en pro de la privacidad en Internet logró lo que yo creía imposible: ¡irritarme! Ante la pregunta del presentador sobre cómo evitar dejar semejante rastro digital en lugares como Facebook o Twitter, a la muy iluminada no se lo ocurrió otra cosa que afirmar: «se trata de usar menos las redes sociales y aprender a programar». Obvia la reacción del presentador: «pues no sé cuántos de nuestros oyentes estarán dispuestos a ello». Yo hubiese dicho lo mismo.

Esto es una pose, es como ponerse una camiseta del Ché y con ello sentirse progresista. «Aprende a programar». Ya. Se me ocurren mil y una razones por la que la sugerencia, muy romántica, eso sí, resulta totalmente descabellada. No soy de las que piense que aprender a programar sea para mentes especiales, privilegiadas pero sí afirmo que es una tarea ardua y difícil, y también afirmo que si bien es fácil crearte una aplicación, es sumamente difícil hacerla de modo seguro, suficientemente segura como para ponerla «ahí fuera en Internet» y que en 3 patadas no te venga alguien y te la destroce o llene de spam.

No obstante, opino que está al alcance de todo el mundo salirse de las redes sociales habituales (ya saben, tuenti, facebook, etc.) sin convertirse en un ermitaño digital. Cuesta esfuerzo, sí, pero la recompensa está allá. Esto no es exclusivo de nuestra vida digital: En cualquier otro ámbito de nuestras vidas «las cosas bien hechas cuestan». Toma mucho menos esfuerzo alimentarse de comida precocinada y pasar todas las horas fuera de horario laboral tumbada en el sofá viendo la tele que comer equilibrado y llevar una vida activa, pero pocos dudamos de que la recompensa (en mejor calidad de vida) se obtiene, vaya que sí.

Esta es mi receta para las personas sin excesivos conocimientos de tecnología (pero que se manejen bien con un ordenador) para librarse de la tiranía de las redes sociales «fáciles de usar».

Hazte un blog

Se trata de no dejar de transmitir y compartir con tus allegados. Con un blog, puedes escribir comentarios cortitos (como si fueran tweets), puedes publicar fotos, videos, escribir textos un poquito más largos… Una vez creado el blog y con un acceso directo en tu escritorio y las contraseñas salvadas por el navegador, la diferencia en esfuerzo entre bloguear y escribir en tu muro de Facebook radica en que a lo que escribes le tienes que poner título (lo cual a la larga redundará en búsquedas más amigables de las cosas que decías hace unos años…) y a lo sumo tres clickazos más.

Al principio tu blog será aburridillo (cabecera azul, fondo blanco, letras negras…) y poco a poco comenzarás a explorar eso que se llaman «las opciones de administrador». Empezarás a cambiar colores, fuentes de letra, después aprenderás lo que son plantillas, … y si lo tuyo es lo visual, acabarás con un blog de un aspecto hasta profesional.

Sí, vale, pero ¿cómo se enteran mis amigos de lo que he escrito, si ellos solo miran el Facebook? Pues mándales un mail con el link a tu último post con las fotos de las vacaciones. Y si tienes algún amigo que no sepa qué es eso del email, o ni lo mire… pues puedes utilizar temporalmente tu muro de Facebook y publicar los links a tus artículos. Lo mismo aplica para Twitter.

Yo recomiendo crearse el blog en un entorno totalmente gestionado, donde solo «crees» tu blog en un proceso similar al de crearte una cuenta de correo (o una cuenta de Facebook). Si puedes evita Blogger y créate el blog con WordPress.org. Esto por una razón que será aparente más abajo…

Aprende a usar RSS

El RSS es la leche. Cuando se lo explico y enseño a amigos y conocidos, siempre alucinan por lo potente que es. Así por encima podemos decir que es un sistema que te permite suscribirte a contenidos que te interesan. ¿No se entiende nada, verdad? Pues digamos que usando RSS puedes decir qué cosas te interesan leer (por ejemplo: la sección de deportes de El Mundo, el blog de ¿Quién Vigila al Vigilante?, el Twitter de mi amiga Paca…), las puedes agrupar por categorías… ¡y ya está! Cuando abres «tus RSS» lo que ves es un portal de información a la carta: se te muestra única y exclusivamente las cosas que has dicho que te interesan.

RSS no es una aplicación en sí, no os puedo dar una URL de donde «descargar el RSS» o donde abrirla. Pero hay muchas aplicaciones que utilizan RSS y a las que nosotros como usuarios hemos de recurrir. Una aplicación que a mí me gusta para gestionar mis RSS es Google Reader. Aconsejo que la probéis, que probéis a transformar vuestra ronda diaria de leer periódicos en Internet en tener Google Reader abierto y recibir la información en tiempo real. Cuantos más feeds de amigos (el twitter de Paca, el feed de mi blog…) tengáis, pues más se parecerá vuestro RSS a la información que recibís a través de las redes sociales. Solo que libre.

Aprende algo de HTML

El HTML es el «lenguaje» con el que están escritas todas las páginas Web (incluso Facebook). No es un lenguaje de programación, es mucho más sencillo. De hecho, a mí me gusta explicar HTML diciendo que es un sitio donde escribes tus contenidos, tus textos, pones tus fotos… y los elementos del lenguaje no son más que «rotuladores de subrayar». Existe un rotulador que se llama strong y que sirve para que marques las partes de tu texto que quieres que aparezcan en negrita. También hay un rotulador que se llama h1 y que sirve para que marques la parte de tu texto que quieres que sirva como título principal. También hay rotuladores em que sirven para dar énfasis (poniendo en itálica) e incluso rotuladores que te permiten decir qué parte de tu texto es en realidad una foto.

Aprender HTML básico (nada de CSS, nada de XHTML, ¡nada de eso! -si te interesa, hazlo más adelante…-) es facilísimo y no hay excusas tipo «soy de letras». ¡Quien sepa subrayar sus apuntes de fosforito de diferentes colores está dotado de las estructuras mentales requeridas para comprender el HTML!

Consigue la independencia: llévate tu blog a casa

Es posible que estés pensando: ¿de qué me vale usar un blog gestionado por WordPress.org? Esta gente tiene mis datos igual que los tiene Facebook… y me has hecho trabajar en balde. Sí, cierto, pero por algo hay que empezar, y de buenas a primeras no se puede tirar a alguien que no sepa nadar al lado profundo de la piscina.

Ahora de lo que se trata es de aprender de verdad de qué va esto de la Web, y conseguir «empoderarte» de un modo que, honestamente, no conseguirías siguiendo los consejos de la señorita de Click y apuntándote a un curso de programación. Se trata de que te lleves el blog a casa. En otras palabras: que te organices un hosting, que te compres un nombre de dominio (¡tener tu propio espacio en Internet con nombre y apellidos mola!), que aprendas a publicar contenidos en la Web «a lo machote» (aprendiendo a usar programas que te permitan crear en tu PC y luego transferir «al hosting» como es FTP), que aprendas a INSTALARTE Y CONFIGURARTE tú mismo tu propio blog sin echar ni una línea de código, solo copiando, pegando, siguiendo instrucciones… y a partir de ahí, ¡eres el rey!

Porque hay gente con una capacidad profesional de producir software que ha creado sistemas libres, que puedes bajarte e instalarte tú mismo, que reproducen prácticamente toda la funcionalidad de tus redes sociales favoritas. La diferencia es que tú las gestionas, tú las albergas, tú decides a quién le das acceso a tu información y a quién no.

Ejemplos:

  • Para crearte un blog, te descargas e instalas WordPress (igual que el que usabas si has completado mi primera recomendación, pero tuyo).
  • Deja de usar Google Reader (tan abusivo con la información que le proporcionas como Facebook) e instálate un RSS Lounge.
  • Si quieres dejar de regalarle tus fotos a Yahoo! (usando Flickr), te montas un Gallery2.
  • Si quieres tener tu propio Twitter, te montas algo con identi.ca.
  • Si quieres montarte tu comunidad enterita (sitio Web, foros, galerías, chats, lo que se te ocurra…) te montas un Joomla! o un Drupal.
  • … ¡y así muchos más!

Puedes preguntarte: ¿y cuánto tardaré en lograr todo esto? Pues la verdad, bastante. Pero también es cierto que no tienes que llegar hasta el final, y que simplemente trasladando tu medio de comunicación habitual a un blog gestionado por WordPress, en lugar de abrir tu alma al mundo en el portal de Mr Zuckerberg, ya habrás ganado bastante. Tampoco te tienes que agobiar por el tiempo o el esfuerzo requerido. Esto es como perder peso. Y como te podrá decir cualquier persona que haya adelgazado alguna vez en la vida, y como nos decía aquella profa de baile en las sobremesas de sábado en los años ochenta: «la fama cuesta, y aquí es donde vas a empezar a pagar… ¡con sudor!», es decir… lo que algo vale, algo cuesta.

21 comentarios sobre “Cómo dejar de exponerse a las redes sociales sin convertirse en un ermitaño”

  1. El artículo está muy bien, de hecho voy a compartirlo, pero no entiendo cómo recomiendas salir de Facebook a la par que aconsejas Google Reader. Sí que es un buen producto (creo que el mejor de su especie), pero no deberías recomendar algo como Gregarius (http://sourceforge.net/projects/gregarius/)?

  2. A., tienes toda la razón. Esto va en línea con otra serie de posts que llamo «la adicción a Google»:

    http://lavigilanta.info/wordpress/?p=1970
    http://lavigilanta.info/wordpress/?p=618

    Es mi proceso de «desenganche» de servicios privativos en la Web, y acepto y admito que abandonar Google Reader me resulta muy difícil.

    Así que ¡¡¡muchas gracias!!! No sabía de Gregarius. Lo voy a probar, y ojalá me ayude a dejar a Google definitivamente…

    También actualizo el artículo para proponer Gregarious en la última parte (la de obtener independencia). En la parte de «aprender RSS» de momento dejo Google Reader; es mi recomendación antes de empezar a considerar temas de hospedar y gestionar tus propias herramientas, y me parece que sin RSS, es decir, sin «orejas para seguir a tus amigos», el esfuerzo de abandonar FB sería un fracaso.

    Saludos 🙂

  3. A. tienes razón. Mi pequeña teoría: los lectores RSS han de ser online (contra lo que se podía pensar hace años, no se usan para leer noticias offline, sino para leer noticias sin consumir tiempo yendo a cargar páginas), para facilitar su acceso/sincronización desde distintos equipos.

    Problema de los lectores RSS online domésticos: al ir haciendo fetch de más y más feeds durante un tiempo prolongado, el rendimiento del sistema cae mucho (al realizar búsquedas etc., que es uno de los puntos fuertes de GReader). De facto, te obligan a elegir entre tener una aplicación lenta o vaciar la cache de posts/feeds guardados, con lo que pierdes enlaces que tuvieras etiquetados especialmente etc.

    ¡Solución a la vista!

    Integrar algo como RSS Lounge (¡en el que funcionan nuestras amadas J y K!) con SemanticScuttle (que es una gozada), de forma que los posts que etiquetemos en RSS Lounge (más allá de la etiqueta del feed, se entiende) se guarden automáticamente en tu SemanticScuttle… se supone que coges el hábito de etiquetar todo lo que te gusta, que guardas automáticamente en Scuttle y… cuando flushees tu lector de feeds no tendrás el efecto adverso (no encontrar aquel link que recuerdas haber leído).

    Esto debe hacerse transparente: etiquetas y una aplicación habla con la otra (SemanticScuttle tiene una API parecida a Del.icio.us, de forma que se puede postear desde otra applicación).

    En fin, que os aburro. Que si ponemos una huchita le pagamos a alguien que lo integre. Bueno, hasta podría intentarlo, que nos saldría más barato y ando buscando aventuras 😉

  4. Ah, por cierto, a mí Gregarius no me convenció nada cuando lo probé hace unos años (no encuentro mi post al respecto :(). Tiny Tiny RSS al menos era mejor, podías mantener los feeds visibles sólo para el usuario y eso, sin .htaccess ni cosas así, con un login como dios manda. RSS Lounge lo tengo que probar a fondo, mi experiencia me dice que si no soluciono el guardado de enlaces interesantes, acabaré borrando cache y perdiendo links… por eso mi aburrido comentario anterior xD

  5. Agradezco alternativas a Gregarius. Yo lo probé pero lo desestimé porque iba demasiado lento para la cantidad de feeds que tenía (ahora tengo todavía más).

    PD: Una alternativa a sitemeter puede ser Piwik 😉

  6. A. dejé un comentario pero lo ha debido frenar el antispam (precisamente porque puse enlaces). En el comentario daba una explicación de mi experiencia… me aparece aquí en modo Awaiting Moderation así que copio pego (sin enlaces).

    ===
    A. tienes razón. Mi pequeña teoría: los lectores RSS han de ser online (contra lo que se podía pensar hace años, no se usan para leer noticias offline, sino para leer noticias sin consumir tiempo yendo a cargar páginas), para facilitar su acceso/sincronización desde distintos equipos.

    Problema de los lectores RSS online domésticos: al ir haciendo fetch de más y más feeds durante un tiempo prolongado, el rendimiento del sistema cae mucho (al realizar búsquedas etc., que es uno de los puntos fuertes de GReader). De facto, te obligan a elegir entre tener una aplicación lenta o vaciar la cache de posts/feeds guardados, con lo que pierdes enlaces que tuvieras etiquetados especialmente etc.

    ¡Solución a la vista!

    Integrar algo como RSS Lounge (¡en el que funcionan nuestras amadas J y K!) con SemanticScuttle (que es una gozada), de forma que los posts que etiquetemos en RSS Lounge (más allá de la etiqueta del feed, se entiende) se guarden automáticamente en tu SemanticScuttle… se supone que coges el hábito de etiquetar todo lo que te gusta, que guardas automáticamente en Scuttle y… cuando flushees tu lector de feeds no tendrás el efecto adverso (no encontrar aquel link que recuerdas haber leído).

    Esto debe hacerse transparente: etiquetas y una aplicación habla con la otra (SemanticScuttle tiene una API parecida a Del.icio.us, de forma que se puede postear desde otra applicación).

    En fin, que os aburro. Que si ponemos una huchita le pagamos a alguien que lo integre. Bueno, hasta podría intentarlo, que nos saldría más barato y ando buscando aventuras

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  7. Jose, en lo que respecta a la integración RSS Lounge y SemanticScuttle, solo tengo una palabra que decirte: ¡Kickstarter! (o Verkami.com,o lanzanos.com, o todos ellos a la vez – mismo concepto). Yo desde luego que pondría algún eurillo en esa hucha para que se hiciese la integración, y por supuesto cuenta con uno o más artículos en este tu blog hermano.

    Con algo así tiene pinta no solo de que me independizaré, esta vez sí, de Google Reader… además, me ayudaría sobremanera en la gestión de referencias y materiales de interés.

    Y otra que te va… esto de arriba lo digo no solo lo digo a nivel personal. Ahora mismo en las corporaciones el nivel de caos debido a tanto p* email es intolerable, y está reviviendo el clamor por herramientas de gestión del conocimiento (aunque con otro nombre, claro, que el KM is soooo passé!) y de trabajo colaborativo. Primera intentona: quitar servidores de ficheros e intentar meter(nos) el SharePoint por los ojos. SharePoint es una tragedia, de esas herramientas que te ponen de mala leche solo de verlas. Potente, sí lo es. Pero también fea, incómoda, no hay dios que la entienda… desde luego no es para usuarios finales… Por aquí hay mucha tela que cortar……………… ¡Es solo una idea!

  8. ¡Qué grande tu post!

    De la herramienta lector de feeds-gestor de marcadores yo tb pienso que sería la bomba en las empresas y tb en los demás entornos de aprendizaje (universidades, institutos, cualquier grupo de personas con objetivos…). Por cierto ¿hay ahora algún nombre más sugerente para «gestión del conocimiento»?

    ¡Un saludo!

  9. ¡Gracias, Bianka!

    Estoy de acuerdo contigo. Si no recuerdo mal, tú también pasaste por la UOC, tenemos una experiencia común que nos ha mostrado de qué manera se necesitan desesperadamente herramientas para organizar bien las ingentes cantidades de información que se generan en el entorno educativo (y más allá, en cualquier organización, del tipo que sea, como bien dices).

    En lo que respecta a los nombres, pues en el entorno donde me muevo (todo rollo MBAs Ivy League: ya sabes, Harvard, Yale, Duke… así como las peninsulares ESADE, IESE, IE) lo han sustituido de dos maneras. Cuando se quieren dar importancia, todo es «intelligence». Competitive intelligence, operational intelligence, business intelligence, por dar unos ejemplos (y no me refiero a técnicas de reporting complejas, dashboards, data mining y eso… un simple PowerPoint con 4 obviedades es «intelligence»!!). Pero en general (incluso si no están hablando de «protegerla», solo de gestionarla o incluso almacenarla) se habla de IP, o sea, de propiedad intelectual (otra vez mismo ejemplo: un miserable PPT cualifica para ello). Triste cambio. KM era ambicioso pero era «una ambición positiva». Intelligence es pomposo, y lo de IP denota un interés monetario total, no interesándose en absoluto en el contenido o «conocimiento» en sí.

    ¡Saludos!

  10. Uh, pues si el cambio ha sido en esa dirección, vaya descarrilamiento del concepto, en mi opinión. Se aleja de las personas para acercarse a la corporación, construyendo la casa por el tejado. Yo lo llamaría gestión de competencias / talento / saberes, porque estas palabras, creo,van más allá del conocer-conocimiento: engloban el saber, el saber hacer y el saber estar. ¡Un saludo!

  11. Bueno, para eso se han sacado de la manga las «universities». Ahora al departamento de formación se le llama la «university» y tiene diferentes «colleges». People college aglutinaría por ejemplo los típicos cursos de sobre trabajo en equipo, gestión del tiempo, etc. Luego habría «colleges» dedicados a áreas más específicas: «finance college», «IT college», etc.

    Lo que los empleados perciben es un «portal» en el que les indican los cursos que les faltan según su perfil/puesto de trabajo (normalmente nada que ver con tu perfil ya que son cursos obligatorios para todos los empleados: Health & Safety, responsabilidad social corporativa (para que sepan todos los empleados «lo buena que es la empresa», cursos de código de conducta e integridad que son obligatorios para empresas bajo Sarbanes-Oxley -ya sabes, toda la normativa «cover your ass» que han de cumplir las empresas que coticen en bolsa estadounidense para «evitar que ocurra otro ENRON»). Claro que el empleado que tenga tiempo (y ganas) puede sacar petróleo de estos «colleges», ya que suelen haber cientos de cursos que le salen gratis personalmente y que pueden resultar muy interesantes.

    El concepto «talent management» también existe. Otrora era la gente de Recursos Humanos que llevaban los planes de carreras, o en neo-latín (o sea inglés corporativo): el HRP (human resources planning).

    Y todo ello, ¡totalmente desconectado de la «gestión del conocimiento» tal y como la he explicado! sí, coincido contigo, es por tema mercantilista/monetario.

  12. Encontré este blog de pura casualidad pero los topicos están muy buenos. Por acá tienes un nuevo lector, saludos desde Argentina.

    Nacho

  13. Qué bueno que te interesaron los contenidos, Nacho. Bienvenido a esta pequeña comunidad de lectores. ¡Un saludo desde el otro lado del Atlántico!

  14. Gracias por tu esfuerzo divulgativo y pedagógico.
    Volveré a dedicar algún esfuerzo a aprender algo de HTML y RSS. ¡Algún día lo conseguiré!

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