El W3C acaba de publicar la segunda versión del WCAG: directrices de accesibilidad para contenido en la Web.
Vale la pena comprender por qué seguir un estándar es imprescindible si queremos que nuestros sitios Web puedan ser consultados por personas que por razones de la vida no pueden usar una pantalla y un teclado como la mayoría de nosotros, echarle un buen vistazo al documento, y comprobar cuán compatible con WCAG son nuestros sitios Web.