En Techdirt leemos esta nota en que se comenta el último caso de un tribunal, en este caso francés, que determina en sentencia judicial que la RIAA (SGAE estadounidense) no puede ir pidiendo a los proveedores de internet (ISPs) «los nombres y apellidos de las personas que en tal fecha usaron tal dirección IP para bajarse tal fichero MP3 con el eMule». El derecho a la privacidad de las personas en Francia es más importante que la cruzada que los jefes de la industria disquera han emprendido contra las personas que comparten música a través de redes P2P.
En el 2005 en Holanda un juzgado llegó exactamente a la misma conclusión.
¡No todos los días podemos dar buenas noticias, pero hoy es uno de ellos!